EL CASO DEL TRANSPORTE URBANO Y EL GOBIERNO SOCIALISTA EN ROSARIO

En nuestro artículo anterior, hicimos un análisis con respecto a los costos y tarifa aplicadas en la ciudad de Rosario por el actual gobierno municipal en manos del Partido Socialista. Si el Socialismo puede ser definido como una ideología que se basa en la Solidaridad, contraria a la que defiende y sostiene la ideología adversa, o sea, la del individualismo, del interés individual por sobre el social, debe impulsar medidas que apunten al beneficio general y no al particular, a los más en vez de a los menos.
Para justificar las críticas observaciones que ya hemos expuesto en nuestro trabajo anterior, recordemos que los rosarinos que utilizan el transporte urbano de pasajeros son alrededor de 500.000 personas diarias, lo que de por sí le otorga la  condición de que ellos constituyen una masa de seres humanos muy superior, extraordinariamente superior a los que desempeñan tareas diarias destinadas a otros objetivos que no exigen su  traslado.
Por ejemplo, los automovilistas que gozan del privilegio de poseer una  unidad móvil, aunque los usaran diariamente, no alcanzarían bajo ningún supuesto semejante cantidad. Y nos basta este ejemplo que no requiere de otros para apoyar nuestros razonamientos.
Luego, si los usuarios de los buses llegan a la cantidad de 500.000 diarios, son los más, que por otra parte usan este transporte por su incapacidad de poseer un auto propio y quizás ni siquiera una pequeña moto o una bicicleta; todos tienen la única alternativa del bus o sus piernas.
Esta descripción de la realidad nos habilita  a expresar una inmediata conclusión: si la ideología de la solidaridad nos indica que debemos favorecer a los más que, además, no tienen alternativas a sus alcances, ¿cuál sería o debería ser la actitud y predisposición de las autoridades socialistas de la ciudad para que aplicando la ideología de la  solidaridad dictaran normas, resoluciones o decretos referidas al transporte urbano de pasajeros? Obviamente, concluiríamos de inmediato, que todas esas disposiciones estuvieran amparadas en un mismo principio, favorecer como objetivo básico y esencial QUE EL USUARIO DE LOS BUSES DEBE SER EL PRIVILEGIADO PRIMARIO A FAVORECER.
¿Cómo se debe actuar para satisfacer ese objetivo? En primer lugar mediante la puesta en marcha de un sistema de transporte urbano eficiente y eficaz, que cumpla con las condiciones básicas exigibles, que cumpla horarios, con vehículos adecuados, con plataformas bajas para evitar accidentes, que pare correctamente sobre los bordes de los cordones de las aceras, con personal entrenado para aceptar con paciencia las pequeñas incorrecciones de los usuarios, que observe detenidamente y acertadamente el tránsito, que respete los semáforos y todas las otras condiciones que pueden ser agregadas para que todos viajen amable y tranquilamente.
¿Eso sucede? Solo en parte, en primer lugar porque no se respetan los tiempos de paso basados en las frecuencias ni las paradas correctas, a veces provocando que las subidas y bajadas de los pasajeros sobre todo de alguna edad con dificultades físicas deben ejecutar proezas para subir o bajar, por detenciones en zonas donde se hallan las mayores distancias plataforma-suelo y otras incorrecciones que lastiman permanentemente, inconvenientes solucionables sobre todo por parte de la empresa municipal o mixta que presta los servicios en Rosario, lo que no significa que también sea exigible en la empresa privada que también lo cumple.
Y para los que sostengan que estos detalles son solo problemas menores debemos responder que cuando constituyen dificultades de todos los días y en usos repetidos se transforman en hechos muy cuestionables para quienes lo deben soportar, máxime si, además, alguna dificultad física lo agrava considerablemente.
Agreguemos un hecho más que me sucedió a mi días pasados mediante un viaje en la línea 121 que yendo por Santa Fe se detuvo en Dorrego y siguió sin detenerse hasta Alvear ¿a quién se le ocurre que un bus pueda atravesar cuatro cuadras sin detenerse?
Y este es solo un conjunto de incumplimientos que señalan  que el principio fundamental que debe cumplimentar el servicio se refiere a aspectos de eficiencia y eficacia, que obviamente, no se satisfacen.
Paralelamente debemos referirnos a otros tópicos que como según alguna histórica afirmación que sostiene que “la víscera más sensible del ser humano en el bolsillo”, ataca y lesiona esa víscera con la confección de costos y tarifas elevados e incorrectos.
Anteriormente nos referimos a que, siendo el servicio de transporte un servicio que beneficia a todos, los costos no deben soportarlo solo los que lo usan directamente sino todos los que también se benefician obvia y claramente, cometiéndose contra los usuarios un atropello adicional que está incluido en los mayores costos derivados de la menor cuantía de pasajeros que no abonan el servicio como los de más de 69 años, y otros que solo pagan el 50%; ello es la consecuencia de que al disminuirse la relación costo km/pasajeros transportados, la disminución de este número aumenta sensiblemente los costos tarifarios; y en otra comprobación que cuando la municipalidad favorece a los poseedores de coches particulares para que penetren a cualquier hora en zonas álgidas o estacionen también en ellas, afecta la velocidad promedio, produciendo un incremento en los costos como resultado de menores km asignados a cada vehículo.
Para entendernos bien, la reducción de los pasajeros transportados aumenta los costos así  como la reducción de los km recorridos también los incrementan, resultando todas ellas medidas que van en contra del principio señalado por una política de solidaridad reemplazada por la ideología del individualismo, favoreciendo exclusivamente a los dueños de coches particulares y a los comerciantes que también lo exigen y perjudicando con mayores tarifas a los únicos giles a los que identificamos como los  usuarios que obligadamente deben subir a los buses sin otras opciones.
Demostrado palmariamente que el municipio con gobernantes socialistas no cumplen con el objetivo fundamental indicado por la SOLIDARIDAD debemos hacer constar nuestro convencimiento de que este gobierno SOCIALISTA  no satisface ni a su propia ideología o cultura diferencial que tendría la obligación de satisfacer.
Jueves, 5 de abril de 2012