El
discurso de la Presidenta destinado a la apertura del año legislativo que duró
3 y ½ horas fue una nueva demostración de una capacidad oratoria
extraordinaria, muy fuera de lo común, a tal punto que podemos llegar a la
conclusión de que resulta superior a todo lo escuchado tanto en el país como en
el resto del mundo.
Claro que tenemos que admitir que esa capacidad para discursear sin
hiatos con una perfecta hilación entre unos y otros temas, citando y citando e
informando e informando, sin peros….y es, a veces no garantizan que esa
extraordinaria solvencia discursiva sea avalada por el contenido de ese
DISCURSO.
Y como la hoy dispersa y
derrotada oposición, con un grupo A desarmado para la seguir expresando su
total incapacidad y podríamos agregar cordura, que posee la condición primaria
del ODIO para poner como bandera excluyente de todas sus opiniones, cuando
pretende criticar las expresiones presidenciales no tiene otra posibilidad ni
variante que negar y negar y negar, sosteniendo, bajo el concepto banal y
estúpido de lo que el discurso ha contenido, que ha omitido otros aspectos,
como si ellos reducidos a la impotencia y orfandad pudieran ser los jueces
infalibles de “qué se debía mencionar y que no”.
Primera crítica insulsa e
incorrecta a la que todos recurren con el objetivo, además, en no dar sus
opiniones con referencias a los temas si tratados. Es una gambeta idiota
que apunta a ocultar el hecho valedero de su total incapacidad.
Las expresiones de una
senadora para utilizar un solo ejemplo destinado a reflejar esta conducta
basada en la incapacidad para contestar con opiniones propias lo escuchado,
cuando sostuvo que “cuando la Presidenta le pidió ayuda y colaboración a los
sectores opositores puso de manifiesto que el país en realidad anda mal
económicamente y les pide ayuda para salvarlo“, resumiendo en esa frase toda su
incapacidad para el análisis que oculta su cerebro vacío y su ignorancia total.
Y agreguemos para no
quedar rengos con un solo mate, las quejas de ese periodista que basado también
en su descomunal ODIO, escuchó mal y lo sigue repitiendo cuando sostiene que la
presidente comunicó que propondría elevar de dos viajes semanales a las Islas
Malvinas a tres, se quejó de que era una barbaridad ese incremento de dos a
tres viajes DIARIOS a las islas cuando ni siquiera esa frecuencia de vuelos se
ejecutaba ente Bs. As. y Córdoba que en realidad tiene frecuencias de nueve
solo en los días lunes. La conclusión, también es excesivamente obvia y
solo el ODIO puede explicar
que quien a sabiendas comete esos “errores” ha perdido todo el respeto por sí
mismo, o como se suele decir “su auto estima”.
Pero dejemos de desnudar a
los imbéciles ya que ellos se desnudan solos y dediquémonos al contenido del
discurso presidencial.
Dejemos de lado la
historia, la breve historia que va desde el 2003 hasta el presente con todos
sus números que podemos resumir en el crecimiento del 9% anual y pasamos a
referirnos a las medidas propuestas para transformarse en leyes que si tienen
importancia.
Permítasenos otros dos
desvíos. Uno el referido a la novedosa conducta del loquito Macri, que en
realidad se hace el loquito dispuesto a seguir construyendo la figura de gran
opositor que le exige la derecha con el objetivo de transformarse en el gran
candidato para ganar en el 2015, para ser un títere que responderá sin dudarlo
a todos los planes que se le sometan en tanto él seguirá sus vacaciones en
algún otro prostíbulo mejicano.
El otro para comentar es el
error cometido por la presidenta que al hacer mención a los docentes hizo
hincapié en las horas de trabajo diario y en las vacaciones que citó como
prolongadas.
Dos observaciones que solo
se explican por la resistencia de los maestros de no comenzar las clases
sin que se le satisfagan sus reclamos salariales, aptitud que está amparada en
el derecho de huelga, así como también en el pago de los eventuales días no
trabajados. Actitud que explica las expresiones de la presidenta dado su
política de creciente apoyo a todo el proceso educacional efectuado durante
todos estos últimos años, pero que, desgraciamente no las justifican. Habrá que
reconstruir ese tejido dañado innecesariamente.
Pasemos al fondo de este
análisis, dos son las propuestas que comunicó la Presidenta , la
primera referida a la terminación, definitiva y absoluta del régimen monetario
del 1 a 1, que fue el origen de los desastres que Argentina soportó en el 2001.
Haber terminado, definitivamente, con un régimen mediante el cual el país
entregó al FMI y al Consenso de Washington su total soberanía monetaria
es tan importante que ya deberíamos estar organizando un gran Festival para
hacer de ello un gran acontecimiento.
Con esa medida de
anulación, el restablecimiento de todas las funciones destinadas a hacer del
Banco Central el conductor de la política monetaria, de crédito y otras más que
deberán ser complementadas con un agregado legal declarando a las entidades
financieras como funcionales al “servicio público”; a las cuales se han opuesto
y silenciado los alcahuetes del liberalismo económico dado que pisará sus
callos, y estos no por mero odio sino exclusivamente por interés, es otra
resolución que deberíamos estar festejando y acompañando con todo nuestro
fervor.
La otra propuesta de
capital significación es la referida a las modificaciones de las normas
contenidas en el Código Civil y el Código Comercial que permitirán actualizar
normas arcaicas muchos de ellas pesadas totalmente de moda.
¡Qué la Presidenta no
propuso nada! Gorilas dedicados a rumiar sus ODIOS, abran los oídos, lean
correctamente, remojen sus patas, que sufrirán menos “el dolor de ya no ser”
como dice un conocido tango, advirtiéndoles que ya no son y seguramente no lo
serán más los dueños del país.
Jueves, 8
de marzo de 2012