En
estos días vienen aumentando las expresiones de ODIO irracional impulsados por
los medios de comunicación monopólicos que les ayude a mantener y generar
esa incremento, por ahora, sin límites a la vista.
Como ese ODIO no tiene justificativos a menos que sea
la forma más conveniente para expresarse como oposición total y absoluta, sin
fisuras y sin reconocimientos parciales, sino como producto de causas
profundas, absolutas, irreprimibles y, por lo tanto, solo totalmente
justificadas por todos aquellos que lo utilizan como único estandarte para
amparar sus conductas, los que no Odiamos debemos hacer el mayor esfuerzo de
comprensión posible para analizar el porqué de ese ODIO TOTAL.
Para comenzar deberé dejar
establecido que yo también ODIÉ, no con tanta intensidad ni rechazos, pero si,
odié a todo un sector de la población argentina que había pasado a gobernar el
País, “atacaba” algunos de los principios fundamentales que yo creía
debían regir a las sociedades.
Pero, afortunadamente, mi
odio fue transitorio, duró hasta los comienzos de 1957, ya que a partir aproximadamente
de esa fecha dejé de lado mis odios y dediqué mi vida política a
esforzarme por comprender las actitudes ajenas, los derechos y las causas que
las motivaban y, poco después pasé a conformar como parte de un grupo a
luchar en contra de la negativa de reconocer sus razones, sus justificaciones
plenas de sus derechos conculcados, a tal punto que, cuando las elecciones de
1963, me mediqué a desarrollar una campaña destinada a la abstención de
todos dada la decisión militar de impedir la presentación a elecciones del
grupo político que, poco atrás, había combatido con mis odios.
¿Por qué esos viejos
ODIOS han reaparecido? En parte podemos asegurar que son el producto de
aquellos viejos odios de clase y , por lo tanto ,insuperables para los sectores
sociales dado que conforman una forma, una manera de vivir que nunca,
jamás, podrán comprender los comportamientos de las clases más bajas; su
cultura y sus vidas todas, desde la cuna hasta su desaparición física,
les impiden comprender, aún hoy, como las sociedades han avanzado basadas en
los avances civilizatorios de los últimos siglos; es un sector que vive, y por
lo tanto desea sostener una estructura social de las etapas de LUIS XIV y
similares.
No vale la pena
indagar en las causales del ODIO de ese sector social para el cual el olor y el
color “negro” de algunos, mantiene una capacidad de odio y rechazo que
les permite seguir viviendo a contramano de la realidad.
Tampoco vale la pena
detenernos en el otro sector que genera causas y motivos para mantener e
incrementar ese ODIO, este es un sector que defiende no sus falsas
alcurnias sino solamente sus intereses monetarios expresados en negocios
de cualquier naturaleza y legitimidad que les permita seguir ejerciendo el
poder que otorga el dinero solo con el objetivo de que el mundo siga las
equivocados rumbos de sus errores que, desgraciadamente, lo conducirán a un
desastre totalmente previsible. Total, en el futuro, ellos vivirán en
otro planeta que ya están investigando.
Lo más complejo de esta pretendida
investigación radica en la determinación de ese comportamiento basado con
exclusividad en el ODIO, está destinado al resto de los participantes de esta
orgía basada en el ODIO, en particular a algunos periodistas escribas o
de TV, a casi todos los políticos del grupo de la oposición, meros repetidores
de dichos y afirmaciones ajenas, incapacitados de hacer análisis de las cosas
buenas del Gobierno, de aplaudir y de criticar, como lo hacemos todos
aquellos que observando sin odios, juzgamos las medidas positivas y
criticamos con total acritud las que consideramos equivocadas e
ineficientes.
Y vamos a terminar con
algunos ejemplos que nos permite justificar el juicio precedente:
En estos días los diarios
Clarín y La Nación vienen dirigiendo una denuncia contra Boudou, el actual
vicepresidente, acusándolo de haber influenciado en favor de una empresa en
particular. El tema está en la Justicia, en las primeras etapas pese a lo
cual algunos ya han decidido pedirle en el Congreso la iniciación de un Juicio
Político; Mario Amadeo y Patricia Bulrich, la “nena” en el decir de los medios,
que ya anda por los 50 años de ese nenaje y está sentada sobre 5000 has de
tierras productivas, que para justificar su decisión, declaró que “ella tenía
todo preparado y que ahora llegaron las pruebas”, con lo cual pone en
evidencia la inversión mental al que su ODIO la conduce, primero preparó el
juicio y luego las pruebas.
Mario Amadeo, también
declara su decisión de hacer juicio político al vice, pero en apoyo de esa
decisión no refiere ninguna prueba, salvo la de decir que “ellos, su grupo, es
duro de domar” aunque no se trate de un potro bravío sino solamente de la
verdad que puede resultarle más difícil.
El tercer ejemplo es el del
diario La Nación que para sumar esfuerzos a la persecución, publica una nota
bajo el título ”Carlos Rívolo, el fiscal que tiene en vilo a Amado Boudou”, que
nos hizo pensar a todos “aquí está la posta” y que en realidad no es más que la
biografía de un abogado que jugó al football y al “rugby” y que luego de algún
tiempo llegó a fiscal luego de haber sido introducido a la carrera judicial
en tiempos de la dictadura que quizás sea un duro investigador como deben
serlo todos los fiscales, pero que esperamos no sea hincha de Videla.
Finalizando y tomando el
compromiso personal de que para el caso de que Amado Boudou sea culpable de
algunas de las acusaciones que se le imputan, seremos los primeros en
manifestarnos que sea juzgado, pero que igual actitud exigiremos a todos los
opositores que basados en el ODIO lo dejen de lado y comiencen a utilizar
la verdad y las razones para sus juicios.
Lunes, 12
de marzo de 2012