En
artículos anteriores hemos venido señalando que para los sectores dominantes de
la economía nacional y mundial el resultado de todas las medidas tomadas por el
gobierno nacional basadas en el mayor grado de intervención en la economía que
han limitado, en parte, las falsas decisiones que esos mismos impulsan, como
ser la validez de la teoría del Mercado, manejado a gusto y placer por los
monopolios y oligopolios y los reclamos de AJUSTE permanente, no serán
aceptadas JAMÁS.
Por ello, todas las batallas ganadas en estos últimos años, a pesar de
ser muchas aunque no totales, no nos deben llevar a engaños. Para quienes
quieren mantener ese dominio, son solo batallitas, lo que no los hará renunciar
a darse por vencidos hasta no lograr que esas batallas perdidas se transformen
en una GUERRA que los declare ganadores.
Para lograrlo cuentan a su
favor a los medios de comunicación también monopólicos, la capacidad de
dominio que le otorga sus ingentes y crecientes capitales, a un conjunto de
políticos derrotados en las urnas y a periodistas aliados, al viejo y
nuevo gorilismo vigente y actuante, charlatanes de feria y otros que, sangrando
por la herida, se han sumado a ese sector de variada composición pero
unidos en sus odios que no pueden dejar de lado aceptando la realidad, para lo
cual se venden al mejor postor pasándose al bando contrario sin avergonzarse,
renegando de sus propios posiciones por un mendrugo, no tan mendrugo sino de
unos cuantos PESOTES, que les permite cambiar honestidad por GUITARRA,
como denominan los muchachos del barrio a la guita que hace más felices a estos
sinvergüenzas.
Pobres de ellos, en fin,
pero que serán irrecuperables porque esa guita dulce les permite superar su
propia desvergüenza, ya que con las palabras se puede construir cualquier falsa
defensa y taparse los ”ombligos” para no utilizar otros agujeros por respeto a
los lectores.
Y cuando los que apoyamos
aún con críticas a este gobierno, debemos tener en cuenta que en esa segunda
etapa eso que ha dado en llamarse la “sintonía fina”, encontrará en ese grupo
de poseedores de las riquezas, de las empresas extranjeras que responden
a sus sedes matrices, a los bancos que desean seguir gobernado los capitales
financieros para obtener más y crecientes beneficios, al FMI, a las hipócritas
calificadores de riesgo país, y a ese conjunto de paniaguados que se llenan sus
panzas por mentir y difamar, una mayor resistencia a todas las medidas que
avancen sobre lo hecho, encontraremos, lo repetimos, una mayor ofensiva
tratando de que esa sintonía fina no avance, y aún más, se vuelva atrás
definitivamente y el país regrese al campo neoliberal, a la dependencia y a la
desigualdad social, concluyendo al resultado que generará la denominada TEORIA
DEL AJUSTE, para que solo el sector de los dominadores salga triunfante.
Todo este análisis nos
lleva a comprender para saber actuar en consecuencia, porque siendo la
resistencia mayor también deberá ser mayor nuestra defensa y nuestra
lucha.
Ellos seguirán intentando
la generación de un proceso de devaluaciones para su propio beneficio,
resistiendo la nueva política de restricción de importaciones innecesarias, el
incremento de la inversión de las crecientes ganancias obtenidas, el cese
de las remesas de capitales mal habidos al exterior donde ya existen
depositados la mitad del PBI, impedir que el proyecto de Ley de Entidades
Financieras se apruebe y que se acabe el aprovisionamiento interno de
combustibles por falta de inversiones se produzca y, etc., etc., que el país se
derrumbe para su beneficio y favorecer la inflación, con todo todos sus
esfuerzos, como lo llevamos dicho, al no poder destruir el proyecto de igualdad
de todos, minando el comercio exterior y sacando dinero transformándolo en
dólares aun devaluados, para que la crisis se inicie y crezca como consecuencia
de los déficit externos.
¡Atenti piaste! como dicen
algunos, a no aflojar ni equivocarnos, el enemigo es muy claro, a no
equivocarnos y a sumarnos en esta lucha dura de la cual, no obstante, saldremos
victoriosos si no nos equivocamos y no nos dividimos.
Jueves,
23 de febrero de 2012